Este proyecto de oposición se suma al presentado en mayo por el Gobierno que busca ampliar la obligatoriedad de la educación sexual, que rige actualmente en educación media hasta 5to básico. La Ministra Cubillo valora el consenso y el debate en esta materia.
¿Cuál es la mejor edad para que los niños y niñas de Chile comiencen a recibir educación sexual en los colegios? Esa es la interrogante que abordaron ayer los parlamentarios de la Comisión de Educación de la Cámara de Diputados en el inicio del debate del proyecto de ley que propone adelantar la formación y orientación en educación sexual integral y afectiva en los establecimientos escolares desde la educación parvularia.
Esta iniciativa, presentada por la presidenta de la Comisión de Educación Camila Rojas, se suma al proyecto ingresado en mayo pasado por el Gobierno, a través del Ministerio de Educación y el Ministerio de Salud, y que busca modificar la Ley 20.418 sobre Información, Orientación y Prestaciones en Materia de Regulación de la Fertilidad en Chile. Actualmente la norma obliga a los colegios a impartir educación sexual desde octavo básico y la propuesta del Gobierno busca comenzar la obligatoriedad desde quinto básico.
Según señaló ayer la Ministra de Educación Marcela Cubillos al diario La Tercera, “hay un consenso en que se debe adelantar la obligatoriedad para los colegios, y al mismo tiempo tener una fiscalización eficiente”.
Al debate también se suman agrupaciones de padres y apoderados que han manifestado su preocupación respecto a las temáticas sobre sexualidad que se abordarán dentro de las aulas y con niños y niñas pequeñas, ya que, a su juicio, esta norma podría vulnerar el derecho de cada familia sobre qué educar en esta materia.
No obstante, y frente a esta crítica, la diputada Camila Rojas explicó al diario La Tercera que el proyecto es "de sexualidad y afectividad integral", y por tanto "no se trata solo de sexo", sino que se adecuará al desarrollo cognitivo y la edad de los niños y niñas, enseñándoles sobre el afecto y las relaciones sociales y de pareja.
En tanto, el Director Académico de Cesi, Daniel Seguel, señala que es primordial que la educación sexual y afectiva se entregue desde los primeros años de formación académica ya que “se centra principalmente en saber reconocer partes de su cuerpo como privadas e íntimas, aprender a respetar los derechos de sus compañeros, ayudarlos a establecer límites sanos y estrategias vinculares en caso de que estos sean traspasados”. Agrega que “Todos los organismos que saben sobre la materia como la UNICEF, UNESCO, ONUSIDA, entre otros, disponen de evidencia suficiente a través de estudios internacionales que avalan la efectividad de la educación sexual integral generando un descenso en el inicio precoz de la vida coital, una mayor prevalencia de autocuidado y disminución de la tasa de embarazo no planificado”, de ahí la importancia de generar el debate sobre la importancia de tener educación sexual integral en Chile.
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